En una mañana de domingo, en 1997, Julie Kemp estaba volviendo de la iglesia con su marido, Andy, y su hijo de 8 años, Landon, cuando una ambulancia chocó contra el automóvil. Andy murió en el acto. Landon fue resucitado por los socorristas y transferido al hospital de Carolina del Norte, en los Estados Unidos.

El niño fue considerado muerto más de dos veces aquel día, pero fue traído de vuelta a la vida. Frente a la gravedad de su estado, los médicos no dieron esperanza de que sobreviviría a Julie.

“Ellos me dijeron que si el sobrevivía, quedaría como un bebé que no sabe caminar, hablar o comer, por causa de los daños cerebrales”, contó Julie. “Estaba tan desesperada que por mi estaba bien, aceptaría eso solo para tenerlo conmigo”.

En el velorio del marido, Julie recuerda que se sintió abandonada por Dios. “Quede muy desepcionada, con el corazón roto, sin entender por que sucedió aquello.”

“No entendía por qué El no había enviado ángeles para protegernos. Pero poco mas tarde, oré con todas mis fuerzas para que Landon viviese”.

Landon sufrió un traumatismo craneano durante el accidente y permaneció en coma. Después de dos semanas siendo mantenido por las máquinas, el niño abrió los ojos. Para la sorpresa de todos, no tenía ningún daño cerebral.

Por otro lado, en medio de la alegría de ver a su hijo en buen estado, Julie sabía que debería decirle a Landon acerca de la muerte de su padre. “Le pregunté a Landon: ‘Sabes donde está tu papá?’. El me dijo: ‘Si, yo se donde esta. Lo vi en el cielo.’”

EXPERIENCIA EN EL CIELO

Muchos años han pasado desde el accidente, pero Landon todavía recuerda sus experiencias en el cielo. “Recuerdo haber visto a mi padre y su amigo que murió un mes antes que él, también en un accidente de auto, y su hijo, que murió años antes. Fue divertido, porque recuerdo que todos estabamos parados en una plaza. Ninguno dijo una sola palabra” cuenta.

Julie recuerda que Landon le contó de otra experiencia impactante. “El dijo: ‘vi sus otros dos hijos’. Yo sufrí dos abortos espontáneos antes de que London naciera. Y el vio mis hijos en el cielo. Nunca le habiamos contado eso a London”, dijo ella.

“Yo sabía que ellos eran mis hermanos, aunque nunca nadie me había hablado acerca de ellos”, afirma Landon. “Pienso que cuando estemos en el cielo, todos sabremos quién es quién allí”.

Cada vez que murió, el niño tuvo una experiencia diferente en el cielo. En su tercera muerte clínica, Landon cuenta que conoció a Jesús y recibió de Él una misión: “Fue como si fuese el trailer de una película, donde uno puede ver algunas partes de la historia. Jesús vino hasta mi y me dijo que tenía que volver a la Tierra, ser un buen cristiano y hablar a otros sobre Él”.

LECCIÓN

Hoy, Landon y Julie comparten su historia con otras personas que están luchando con la pérdida de un ser querido.

“Yo no entendí en 1997, el por qué Dios no envió un angel. Pero se que había ángeles protegiendonos. Estamos viviendo en Su plan. En vez de quedar presos en la tristeza o enojados con Dios, usamos esta historia para ayudar a otros a no desistir y mantener su fe en los días de luto”, cuenta Julie.

“Solo quiero que las personas perciban que Jesús es real, que existe el cielo, que existen los’ángeles y seguir su Palabra y la Biblia mejorará sus vidas”, agregó Landon. “Se que estoy haciendo eso para Jesús. Sé que Él es real. Sé que los ángeles están allí. Se que existe el cielo. Yo vi a Jesús, y sé que está allá. El me pidió hacer esto, y es lo que estoy haciendo”.