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Mi sueño comienza así:

Primero estaba en Santiago chile, mirando el cielo y en eso se formaban 4 remolinos en él. Empezaban con colores verdes, rojos, anaranjados y luego se volvían negros. Bajo ellos había una línea de luz blanca y bajo esa luz blanca había 4 remolinos más pero de color más claro como color tierra. En eso le preguntaba al señor porque esta eso en el cielo y miro a mi izquierda y se enciende un televisor y estaban anunciando guerra entre países que están alrededor de Irán. Para llevar a cabo esto, comienzan a reclutar jóvenes de entre 13 a 18 años no más, los cuales iban a ser usados para la guerra contra los países pequeños que rodean a irán. El objetivo de esta guerra contra estos países pequeños era después destruir al más grande (Por ejemplo Irán y otros que no recuerdo el nombre) y a los hombres adultos los dejaban para la guerra contra los países más grande que se haría después de destruir los chicos.

En eso miro hacia el norte en el cielo y veo como empiezan a matar a estos jóvenes, ellos estaban al terminar chile hacia el norte y los militares adultos q eran de otro país estaban desde el norte a sur frente a estos jóvenes q aún era adolescentes comenzaban a disparar y a matar a los jóvenes  y después q los mataban a todos comenzarían con la destrucción de otro pueblo  pequeño, hasta q acabasen con todos y continuar con los países más grandes. Luego miro el lugar donde estoy y me veo  junto a mi familia en el sur de chile y estábamos en una casa porque nadie podía salir de sus casas porque venía peligro que si bien no era directamente para chile estaba a punto de que lo fuese. en ese momento veo que entra a la casa un militar sin pedir permiso era alto y vestía un uniforme militar que no era chileno, con un misil en sus manos, yo estaba de pie con una bolsa con comida en mis manos para entregársela porque sabía que iba a chile en busca de alimento, ya que en sus países había hambruna, pero él no me aceptaba la bolsa sino más bien me hablaba golpeado y me decía que le dijera donde estaban almacenados los alimentos (la despensa), mas yo le contestaba que no teníamos nada más y él me empujaba como amenazándome con su fusil, y me daba un leve empujón y abría la despensa y sacaba casi todo los alimentos que allí habían para Chile y nos dejaban solamente suficiente alimento para 1 a 2 semanas aproximadamente.

En eso él se iba y yo  volvía a mirar hacia el norte y veo que estos 4 remolinos color tierra habían desaparecido porque ya se habían destruido los pueblos pequeños y veo que los 4 remolinos negros (los de arriba), se empiezan a expandir y veo que desde la tierra comienzan a reventar bombas y explotan en el cielo y se pone todo el cielo gris luego negro y esta oscuridad en el cielo cubre parte del norte  de chile, es por ello que no podíamos salir de nuestras casas porque todo queda muy oscuro y ahí cuando le volvía a preguntar al Señor que sucedía el me decía que comenzaba la destrucción de los países grandes. En eso sentía mucho miedo y ahí era cuando yo pensaba dentro de mí y decía “si el presidente acepta enviar ayuda a estos países se iban a enviar solo jóvenes (13-18 años) de nuestro país entonces me preocupe porque enviarían jóvenes hijos de Dios también a esta guerra”.

Sabiendo que muchos de ellos aún eran adolescentes, entonces comenzaba a clamar a Dios con gran angustia que revocara sentencia sobre todo el peligro que venía a nuestro país, en especial a los jóvenes. Y no tan solo yo clamaba sino también mi papá y gente que estaban a mi alrededor los cuales eran hermanos de mi  iglesia en la cual persevero y sentía de parte de dios en mi corazón y era como si dios nos estuviese dando la orden de que levantáramos una oración ferviente como iglesia y como familia por nuestro país CHILE. Luego desperté clamando por la paz de nuestro país, llorando y pidiendo a Dios misericordia para que el nos guardase de todo mal. Por lo q sé que como dice su palabra “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos; entonces yo oíre desde los cielos, y perdonare sus pecados, y sanare su tierra”.  2° de crónicas 2:14.

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