Jan 19, 2011
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Palabras de Juicio y Esperanza de Nuestro Padre
15/05/10
Sol oscuro, nubes negras, fuertes vientos azotarán la planicie. La gente temerá el bramido del cielo en su hora más negra. El inicuo prometerá mentiras a la humanidad y esta creerá sus palabras. Fuego, humo, volcanes en erupción, temblores de 8 puntos conmoverán la faz de la tierra.
Los que quedarán de Mi pueblo infiel, estarán desconcertados y desearán la muerte, mas no la hallarán.
Bendito serás Israel, porque Yo me fijaré en ti: mujer maltratada, y verán que Yo Soy Dios que te amé desde la eternidad.
Pueblo gentil, llegó tu tiempo de partir junto a muchos de mi nación que han creído a mi anuncio.
Llantos, estupor, ante la desaparición de millones, que no volverán a aparecer. Suicidios en masa para aquellos que no supieron entender.
Es el tiempo de los injustos… de juntarlos a todos para entrar en juicio con ellos.
Hay un gran movimiento en los ejércitos celestes, esto se verá en la Tierra como vientos y huracanes llenos de furia y violencia. Granizo caerá y aplastará las cosechas y destruirá la tecnología perniciosa de este mundo.
Cancelen sus cuentas y busquen la paz con todos. Despídanse como verdaderos siervos míos…
Nadie podrá creer lo que les sucederá a ustedes hijos míos, en el día de la partida. Ni ustedes se lo imaginan, solo aguardan y algunos con luchas interiores…
Oh serpiente emplumada, espíritu de los mayas. Es tu hora… arrástrate en tierra y devora a los inicuos… que pronto tu fin llega. Mi Hijo el Mesías, hijo de Eva, pisará tu cabeza una vez más quitándote todo tu poder y tu reino conseguido con engaño y maldad como han hecho tus reyes perversos de este mundo a los cuales yo juzgaré y echaré al fuego preparado para ti y tus ángeles.
Oh hombres religiosos de este siglo… que me nombran como vuestro Dios pero a mi Hijo no quieren reconocer… no tenéis acceso a mi presencia. Todos deben honrar a mi Hijo, él es la única Puerta, no hay otra…
Los ignorantes de mi evangelio deberán comparecer ante El, y reconocer que no anhelaron ver la luz de su rostro porque sus obras eran malas. No hay salvación fuera de mi Hijo. Muy pocos han deseado ver la luz, y Yo les concedí conocer a mi Hijo de maneras no convencionales… Ellos le llamaron el Gran Espíritu…
Es imposible que el hombre por sí mismo llegue a mí. Nadie puede llegar solo a Mí presencia si no es por el único camino. Pocos, hijo mío, pocos se salvan… Mi corazón sufre esta pérdida cuantiosa. Todo está hecho, no hay más que hacer a favor del hombre.
Oh hombres, hijos de Adán, ya es tiempo de dejar el pecado… Mi Hijo ya murió y resucitó. Ahora reinará sobre el mundo.
Ahora ríen, se burlan, cometen actos vergonzosos sin reparo, y vuestros gobernantes, siervos de Satanás, dictan leyes injustas para respaldar vuestro desenfreno. Pronto lamentarán su elección, porque llega el día del Juicio, Mi Día, para castigar vuestra maldad y ponerle fin a una generación adúltera y pecadora para comenzar una generación de luz y amor…
Siervos de Satanás, es vuestro fin, tiemblen porque el Justo se levanta para juzgar… sangrará mi Tierra de dolor y espanto, los ríos hervirán y los cielos arderán como horno.
Vuestra maldad ha llegado al colmo, ya no los soportaré más. La violencia es peor que en tiempos de Noé. Vuestra inmoralidad no se equipara con Sodoma y Gomorra…
Mi Pueblo se ha contaminado con vuestra suciedad y ha venido a ser peor que una ramera… Pero… mis hijos fieles, esposa de mi Hijo, por ti he frenado el castigo… pronto partirás al encuentro Suyo para desposarte. Yo te rescataré del viejo hogar que te ha traído dolores y sufrimiento. No mires hacia atrás, porque ya no lo verás más…
Siervo mío, se fiel. Yo tu Dios que hablo contigo.
SIRVIENTE DEL REY
